Usa divisores de cajones. Esta es la mejor manera de mantener las pequeñas prendas de ropa del bebé limpias y ordenadas. Puedes organizarlos por manga larga, manga corta o los de noche, por ejemplo. Es mucho más fácil y te ahorra un valioso tiempo si tu bebé necesita que lo cambies a medianoche.
Coloca la canasta de la ropa sucia y una papelera al lado del cambiador. No querrás dejar a tu bebé solo en el cambiador, aunque sea para correr hacia la papelera o la canasta de ropa al otro lado de la habitación. Tenerlos justo al lado del cambiador hace que sea mucho más seguro y más fácil limpiarlo todo después.
Evita el desorden. Lo último que quieres a media noche, cuando está oscuro, es tener que completar un curso de asalto para evitar el desorden en el suelo. Esto significa que puedes evitar encender la luz y despertar al bebé, y mejor aún, lo que significa que puedes volver a dormir antes (¡lo cual siempre es algo bueno!).
Usa la parte superior de la cómoda como mesa para cambiar pañales. Este es un gran truco y te ahorra mucho espacio y dinero. Comprar un cambiador y colocarlo encima de la cómoda, conviertes la cómoda en un cambiador. Sirve para lo mismo, pero no tienes que gastar mucho dinero comprando muebles nuevos que luego no serviran cuando el bebé crezca.
No desperdicies espacio de almacenamiento. ¡Con todos los diferentes elementos necesarios para mantener al bebé feliz, necesitarás todo el espacio de almacenamiento que puedas conseguir! En el armario de tu bebé, intenta añadir una barra adicional debajo de la existente para que quepa el doble de ropa, o coloca cajas de almacenamiento debajo de la cuna con artículos que quizás no necesites aun.
No te olvides de poner a prueba el bebé en el cambiador. Por encima de todo lo demás, el cambiador debe ser un espacio seguro para que tu bebé esté alli. Instalar puertas para bebés, anclar muebles y cubrir enchufes son solo algunas maneras simples de asegurarte de que tu hogar esté seguro. También puedes encontrar fácilmente kits de seguridad online para el hogar, repletos cubre-enchufes, cierres de armarios y protectores de esquinas para ayudarte a proteger tu hogar a prueba de bebés.
No olvides un organizador junto a tu mesa para cambiar pañales. Un pequeño organizador es un lugar perfecto para guardar todos los elementos necesarios cuando tu bebé necesita un cambio de pañal. Intenta conseguir uno con ruedas, de esta manera puede moverlo hacia ti sin tener que soltar al bebé. Puedes guardar toallitas húmedas, bastoncillos de algodón, crema para bebés y pañales, todo en un lugar de fácil acceso. También guarda algo de jugar allí para mantener ocupado a tu bebé mientras lo cambias.
No olvides crear un espacio que también sea para ti. Pasarás mucho tiempo en el cambiador cuidando a tu bebé, por lo que debe ser cómodo para ti. Una silla cómoda es imprescindible, ya que te encontrarás sentado aquí a todas horas de la noche. Intenta conseguir una silla que sea fácil de limpiar y que venga con apoyabrazos para cuando tus brazos se cansen un poco.